marzo 01, 2022
El fertirriego reduce en 31% el uso del agua en la agricultura
Guayaquil, marzo de 2022. La tierra es un planeta con el 70% de agua, pero solo el 1% está disponible en forma de agua dulce y el crecimiento demográfico mundial está generando más demanda de ese valioso recurso. En la actualidad, la agricultura consume entre el 50 y 60% del agua dulce disponible y esta demanda irá creciendo a medida que se incremente la necesidad de consumo. En Ecuador, según datos del Programa de Naciones Unidas por el Medio Ambiente (PNUMA), el 81,1% del uso de agua en el país, es para riego. Por tal motivo, los productores están llamados a hacer uso eficiente del agua en la actividad agrícola.
Existen diferentes tipos de riego, y uno de los que trae mayores beneficios en cuanto al ahorro de agua es el fertirriego. Está técnica utiliza el microrriego (aplicación precisa de agua con mínimo de pérdidas) junto al uso de un fertilizante soluble en agua, por lo que se aplican conjuntamente. De esta manera, el agua y el fertilizante son aplicados directamente a las raíces de las plantas generando una mejor absorción.
La técnica de fertirriego consume un 31% menos de agua, generando una eficiencia en el uso de este recurso del 90 al 95%. Este tipo de técnica de riego ayuda en materia de sostenibildiad ambiental ya que, según la FAO (La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), aproximadamente el 30% de los campos de cultivo que utilizan un método de riego ineficiente pueden verse gravemente afectados a causa de la salinización de las tierras, lo cual reduce su productividad.
Además, mediante el fertirriego, la eficiencia en el uso del fertilizante aumenta un 16%, lo que significa menos aplicaciones y menos emisiones. “La solución de Yara para campo abierto, simplifica el fertirriego, ya que los productores obtienen mayores rendimientos y mejor calidad. Además, esta solución ayuda a enfrentar el cambio climático permitiendo que los agricultores produzcan más con menos. En un estudio realizado con el cultivo de papa en Ecuador, se demostró que esta técnica junto a la solución de Yara redujo en 36% la emisión de CO2”, explicó Jaime Vinces, gerente comercial Yara - Clúster Andino.
Los agricultores deben producir más con la misma extensión de tierra y hacer uso eficiente de recursos, como el agua, al mismo tiempo obtener rendimientos superiores. Por eso, se debe generar conciencia acerca de las implicaciones que genera la agricultura y actuar responsablemente ante el cambio climático, procurando usar los productos y las técnicas más eficientes y sostenibles.
Según la FAO, la escala y la intensidad del uso actual del agua en la tierra es insostenible, y la posibilidad de una sequía imprevista que afectaría gravemente a la producción de cultivos es cada vez más real. Por eso, en línea con los esfuerzos de organizaciones como las Naciones Unidas para asegurar la producción de alimentos. “En Yara, nos sumamos a esta causa y estamos convencidos de que todos los actores en la cadena de alimentos debemos promover acciones que ayuden a preservar este recurso, para alimentar el mundo de manera responsable y proteger el planeta”, aseguró Vinces.